El análisis de CICC considera que la probabilidad de un recorte de tasas en el FOMC de enero (29 de enero) es muy baja; pero si Trump es elegido y se implementan políticas inflacionarias de manera moderada, aún hay una ventana para recortes de tasas en el primer semestre; por el contrario, si las políticas avanzan de manera demasiado agresiva, lo que lleva a la Reserva Federal a evaluar un gran riesgo de aumento de la inflación, entonces el ritmo de los recortes de tasas podría retrasarse aún más. La caída drástica de las expectativas de recortes de tasas ha llevado a una corrección de activos, lo que desde este punto de vista no necesariamente es algo malo, ya que digerir expectativas excesivamente optimistas favorece un aumento más sostenible.