• La seguridad de Bitcoin sigue siendo robusta contra estos desarrollos, ya que depende del algoritmo de hash y la criptografía de curva elíptica.

  • Sin embargo, lo mismo no puede decirse de las monedas de la era de Satoshi.

  • Las monedas de Bitcoin de la era Nakamoto usaron el formato Pay-to-Public key (P2PK). Diferente del formato de hoy, P2PK revela la clave pública, exponiéndola a atacantes cuánticos.

El 10 de diciembre, el fundador de Avalanche encendió un debate al publicar en X aconsejando congelar 1 millón de Bitcoins cuyo valor se estima en 97 mil millones de dólares.

Según las creencias, se considera que fue minado en los primeros días de Bitcoin y está asociado con el fundador de Bitcoin, Satoshi Nakamoto.

Sin embargo, la propuesta del fundador no está en absoluto vinculada con la probable reaparición del fundador de Bitcoin. Más bien, se centró en la amenaza asociada con la computación cuántica que gira en torno a estos activos, que aún se basan en estándares criptográficos más antiguos.

La cuántica romperá fácilmente la encriptación

Publicó en X después de que surgiera la noticia del lanzamiento de un chip de computación cuántica por parte de Google en Internet. Según Google, Willow es capaz de realizar cálculos en menos de cinco minutos. Sirer afirma que la computación cuántica facilitará algunas operaciones como la factorización de números. Sin embargo, todavía hay muchas preocupaciones asociadas con esto.

La seguridad de Bitcoin sigue siendo robusta contra estos desarrollos, ya que depende del algoritmo de hash y la criptografía de curva elíptica. Sin embargo, lo mismo no puede decirse de las monedas de la era de Satoshi.

Las monedas de Bitcoin de la era Nakamoto usaron el formato Pay-to-Public key (P2PK). Diferente del formato de hoy, P2PK revela la clave pública, exponiéndola a atacantes cuánticos más con los que trabajar.

¿Qué más dice el CEO?

El director ejecutivo de Avalanche dice que estas monedas ofrecen la madre de todas las recompensas de criptografía, destacando el riesgo creado por este formato más antiguo si las computadoras cuánticas se desarrollan más. Afirma que la comunidad de Bitcoin debería buscar congelar las monedas almacenadas en direcciones P2PK o establecer una fecha objetivo para su usabilidad.

Con este paso, la integridad general de Bitcoin estará protegida de un futuro donde las computadoras cuánticas puedan romper la criptografía P2PK. Esta idea encendió el debate atrayendo tanto apoyo como críticas.

Los defensores lo ven como un paso activo para reducir los riesgos asociados con la tecnología futura. Sin embargo, los críticos lo ven como un ataque a la descentralización así como a la posesión que apoya a Bitcoin. Las últimas billeteras de Bitcoin utilizan Pay-to-Public-Key-Hash o P2PKH, que solo revela una versión hasheada de la clave pública.

La capa de seguridad adicional asegura que incluso si hay una computadora cuántica presente, primero tendrá que invertir el hash para extraer datos útiles, una nuez extremadamente dura de romper.