Según Odaily, el Congreso está intentando aprobar un importante proyecto de ley de gastos que pretende aumentar los gastos y limitar la influencia del presidente Trump hasta el 30 de septiembre de 2025. Se espera que esta legislación reduzca significativamente la capacidad del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) para influir en el gasto durante los próximos diez meses. Los legisladores están bajo presión para aprobar ciertos proyectos de ley antes del 20 de diciembre, y la propuesta actual sugiere que el Congreso solo debería financiar al gobierno hasta fines de enero. Este enfoque permitiría al presidente Trump tomar decisiones para 2025. En respuesta a estos acontecimientos, Elon Musk comentó: "Eso es realmente malo".
El proyecto de ley de gastos ha suscitado un debate considerable entre los legisladores, algunos de los cuales sostienen que es necesario para garantizar que las operaciones del gobierno continúen sin problemas, mientras que otros creen que socava la autoridad del poder ejecutivo. La aprobación del proyecto de ley marcaría un cambio significativo en la forma en que se gestiona el gasto gubernamental, sentando potencialmente un precedente para futuras administraciones. La urgencia de aprobar el proyecto de ley antes del 20 de diciembre pone de relieve las maniobras políticas involucradas, ya que el Congreso busca equilibrar la responsabilidad fiscal con la estrategia política.
Las implicaciones de este proyecto de ley van más allá de las preocupaciones fiscales inmediatas, ya que podría influir en el panorama político más amplio hasta el año fiscal 2025. Al restringir el poder de gasto del poder ejecutivo, el Congreso pretende ejercer un mayor control sobre las decisiones presupuestarias, una medida que podría redefinir la relación entre los poderes legislativo y ejecutivo. A medida que se acerca la fecha límite, hay mucho en juego políticamente, y ambos partidos son muy conscientes del posible impacto en sus agendas legislativas y el próximo ciclo electoral.