Al subastar o transferir estos Bitcoins, Estados Unidos puede afectar la oferta y demanda del mercado de Bitcoin. Si Estados Unidos vende Bitcoin en grandes cantidades, podría provocar una caída del precio de Bitcoin. Para Rusia, si posee grandes cantidades de Bitcoin o depende de Bitcoin para transacciones internacionales, las fluctuaciones de precios podrían causar enormes pérdidas económicas.