Arthur Hayes, cofundador de BitMEX, aboga por volver a las raíces de las ofertas iniciales de monedas (ICO, por sus siglas en inglés) y pide un enfoque descentralizado y centrado en el comercio minorista para la financiación de criptomonedas. En su manifiesto, “Cómo hacer que las ICO vuelvan a ser geniales”, Hayes critica el dominio actual de las empresas de capital de riesgo (VC, por sus siglas en inglés) y las bolsas centralizadas (CEX, por sus siglas en inglés), que, según él, han dejado de lado a los inversores minoristas en favor de los intereses institucionales.
Hayes destaca cómo el panorama actual de las criptomonedas se ha alejado de sus principios básicos de descentralización y empoderamiento de la comunidad. Critica la influencia de los VC y los CEX, a los que compara con una "enfermedad de transmisión CEXual", por impulsar proyectos hacia valoraciones infladas que alejan a los inversores comunes. "¿Por qué olvidamos que las criptomonedas estaban destinadas a empoderar a los inversores minoristas?", pregunta Hayes.
Él identifica tres factores clave que han impulsado el éxito de las criptomonedas: la descentralización como un contrapeso a las estructuras de poder tradicionales, la tecnología blockchain revolucionaria y el impulso especulativo por ganancias financieras. Sin embargo, argumenta que los inversores minoristas—la columna vertebral del meteórico ascenso de las criptomonedas—han sido marginados por proyectos que atienden a jugadores institucionales. Las monedas meme, a pesar de su naturaleza especulativa, representan un modelo más inclusivo al permitir que los participantes minoristas participen en el mercado sin guardianes.
Hayes llama a un renacimiento de las ICOs como solución. Las ve como una forma de devolver el poder a las comunidades al permitir la recaudación de fondos directa y la amplia participación. Si bien reconoce los fracasos de muchas ICOs de 2017, argumenta que su naturaleza especulativa era una característica, no un defecto, permitiendo a los inversores minoristas aspirar a recompensas financieras significativas. “Los inversores minoristas preferirían arriesgarse en un pequeño proyecto descentralizado que invertir en un token respaldado por capital de riesgo altamente inflado,” explica Hayes.
Él traza un plan para revitalizar las ICOs, enfatizando la importancia de la descentralización, la emisión más rápida de tokens y una mejor tecnología. Los avances en la infraestructura de blockchain, como la reducción de costos de transacción y la mejora de la escalabilidad, ahora hacen que las ICOs sean más viables. Las carteras no custodiales y las plataformas amigables para el usuario reducen aún más las barreras de entrada, permitiendo que más personas participen.
Hayes aboga por evitar plataformas centralizadas y proyectos respaldados por capital de riesgo con altas valoraciones y baja oferta circulante. En cambio, anima a la comunidad a abrazar la naturaleza especulativa y democrática de las ICOs descentralizadas. “Es hora de rechazar el dominio del capital de riesgo y regresar a un sistema donde los inversores minoristas puedan soñar en grande y asumir riesgos audaces,” concluye.
Con el mercado mostrando señales de entrar en un nuevo ciclo alcista, Hayes predice un resurgimiento de las ICOs impulsadas por inversores minoristas y plataformas descentralizadas como Pump.fun y Spot.dog. Estas herramientas, cree, empoderarán una nueva ola de innovación, restaurando el espíritu de experimentación e inclusión financiera de las criptomonedas.
