En el mundo de las criptomonedas, en realidad solo hay cinco monedas que valen la pena para una inversión a largo plazo.
Primero, están dos monedas de corredores líderes, que son BNB y OKB. Gracias a sus ingresos constantes por comisiones de transacción, su capacidad de generación de ganancias es bastante fuerte, incluso pueden compararse con las empresas que cotizan en bolsa.
Además, hay tres monedas de cadenas de bloques públicas, BTC es tan importante como el índice de Shanghái, ETH es similar al mercado de crecimiento, y SOL se asemeja a la bolsa de Beijín. Entre ellas, la relación entre ETH y SOL es un poco como la de los sistemas Windows y Mac; muchos proyectos de imitación y diversas aplicaciones descentralizadas suelen depender de estas dos grandes cadenas de bloques, y las tres grandes cadenas de bloques tienen un fuerte consenso de capital.
Aparte de eso, otras monedas son básicamente solo especulación, como si estuvieran bailando en una burbuja; cuando llegue el momento adecuado para obtener ganancias, es mejor retirarse rápidamente, ya que no son adecuadas para invertir en múltiples ciclos de mercado alcista.