Según Odaily, Charles Hoskinson, el fundador de Cardano, ha expresado recientemente su preocupación por la Operación Chokepoint 2.0, describiéndola como un ataque global y altamente selectivo contra la industria de las criptomonedas. Hoskinson destacó el daño económico y psicológico a largo plazo causado por esta iniciativa y pidió unidad dentro de la industria para abogar por una nueva legislación que impida que tales actividades vuelvan a ocurrir.

Hoskinson compartió sus puntos de vista sobre el impacto global de la Operación Chokepoint 2.0 en la plataforma X, enfatizando que la operación representa un enfoque sistemático que implica acoso, multas, auditorías y la negación de servicios a las empresas de criptomonedas en todo el mundo. Sus comentarios se alinean con los del abogado pro-criptomonedas John Deaton, quien ha sugerido que la administración Trump debería investigar la operación. Los comentarios de Hoskinson subrayan la necesidad de que la comunidad de criptomonedas se una para abordar estos desafíos y trabajar hacia un entorno regulatorio más seguro y favorable.