El año que viene, el mercado mundial de las criptomonedas está a punto de sufrir cambios importantes, con Estados Unidos a la cabeza. Estados Unidos podría utilizar monedas estables para fortalecer el dólar, ya que muchas están respaldadas por bonos del Tesoro estadounidense. Por ejemplo, en septiembre el 86% de la garantía del USDC estaba en bonos estadounidenses. A medida que crezca la emisión de monedas estables, también aumentará la demanda de bonos del Tesoro, lo que generalmente fortalece al dólar. Trump, que está en contra de las CBDC, puede expandir las monedas estables para respaldar aún más al dólar.
La transición a un mercado de criptomonedas liderado por Estados Unidos podría acelerarse, especialmente después de que los republicanos ganen la Casa Blanca y obtengan mayorías tanto en el Senado como en la Cámara. Esto podría conducir a políticas industriales más fuertes, con el proyecto de ley FIT21 ganando terreno. Con la renuncia del presidente de la SEC, Gary Gensler, un sucesor compatible con las criptomonedas podría acelerar estos cambios.