Según Cointelegraph, la saga de James Howells y su fortuna perdida en Bitcoin ha dado un nuevo giro. Hace casi una década, Howells descartó sin darse cuenta un disco duro que contenía 8.000 Bitcoin, ahora valorado en aproximadamente 716 millones de dólares, en un vertedero de Gales. La revelación provino de Halfina Eddy-Evans, ex pareja de Howells, quien reveló que se deshizo del disco duro a petición de Howells. En una entrevista, Eddy-Evans declaró que le pidieron que tirara el disco duro, enfatizando que la pérdida no fue culpa suya. Este incidente subraya los riesgos asociados con la gestión de activos digitales como las criptomonedas y destaca la importancia de una custodia adecuada para evitar pérdidas financieras.

En 2013, Howells desechó por error el disco duro mientras limpiaba piezas viejas de computadora. En ese momento, el valor de Bitcoin era significativamente más bajo que hoy, y la fortuna potencial en el disco pasó desapercibida. Eddy-Evans explicó que llevó el disco duro a un vertedero después de que le pidieron deshacerse de "pertenencias no deseadas." Solo más tarde Howells se dio cuenta de que el disco contenía 8,000 Bitcoin que había minado en 2009, un período en el que Bitcoin se valoraba en menos de $1 por token. El valor actual de Bitcoin se ha disparado, haciendo que los activos perdidos valgan más de $716 millones.

Desde que descubrió la pérdida, Howells ha apelado repetidamente al Consejo de la Ciudad de Newport para obtener permiso para excavar el vertedero en busca del disco duro. Sin embargo, sus solicitudes han sido constantemente denegadas debido a los riesgos ambientales y los desafíos logísticos asociados con el tamizaje de 110,000 toneladas de desechos. A pesar de estos contratiempos, Howells sigue decidido, proponiendo financiar la excavación de forma privada con un plan de $11 millones y ofreciendo donar el 10% de cualquier fondo recuperado al consejo. No obstante, el consejo sostiene que su licencia ambiental no permite tal operación. En respuesta, Howells ha presentado una demanda contra el Consejo de la Ciudad de Newport, buscando 495 millones de libras esterlinas (aproximadamente $647 millones) en daños por su negativa a otorgar el permiso de excavación.

Este caso sirve como una historia de advertencia sobre los riesgos de la custodia propia para los titulares de criptomonedas. Los comentarios de Eddy-Evans destacan la necesidad de soluciones de almacenamiento seguras para proteger los activos digitales. Ya sea utilizando billeteras en línea, billeteras de criptomonedas basadas en aplicaciones o billeteras de hardware, a menudo denominadas "billeteras frías," es crucial almacenar las claves privadas y las opciones de recuperación fuera de línea para minimizar el riesgo de hackeos en línea. Además, mantener múltiples copias de frases de recuperación y claves privadas en lugares seguros, como cajas de seguridad o almacenamiento digital encriptado, puede ayudar a proteger los fondos y prevenir pérdidas financieras.