La industria de criptomonedas ha recorrido un largo camino desde los primeros airdrops, cuando los proyectos generosamente compartían sus tokens, buscando atraer atención hacia nuevas tecnologías y reunir una audiencia leal. Estos tiempos fueron un punto de partida para muchos que, al explorar la industria cripto en formato de juego, alcanzaron la libertad financiera. Muchos usuarios recibieron sus primeros tokens de forma gratuita, y los desarrolladores, ofreciendo productos valiosos, ganaron confianza y respeto.
Sin embargo, lo que vemos hoy es preocupante. Aumenta el número de proyectos que, en lugar de ofrecer valores reales, proponen mendicidad bajo la apariencia de "donaciones para el desarrollo". Sus lemas piden dinero para "café" o "apoyo al equipo", pero a menudo no hay valor real detrás de esto.
¿Por qué es un problema?
1. Tales proyectos no crean valor a largo plazo para la criptoeconomía.
2. Socavan la confianza de la comunidad, convirtiendo una industria innovadora en un mercado de ilusiones.
3. Estos enfoques contradicen los principios de apertura y transparencia que originalmente sustentaban las criptomonedas.
Cuando un proyecto promete "un juego con valores" y luego cambia las condiciones, dejando a los participantes sin aquello por lo que lucharon, no es más que manipulación. Tales acciones solo confirman: la mendicidad no es el camino para crear un ecosistema fuerte.
Debemos reconocer que la industria cripto no se trata de "recaudar dinero para café". Se trata de tecnologías que están cambiando el mundo. Ha llegado el momento de rechazar proyectos que, bajo la apariencia de desarrollo, ocultan un fraude evidente.
La cripto-comunidad merece algo mejor. No apoyen lo peor. Aspiren a proyectos que realmente creen valor y les ofrezcan algo por lo que valga la pena luchar.
