Déjame contarte una pequeña historia que me pasó recientemente.
La cosa es así, conocí a una mujer de 34 años en el mundo de las criptomonedas, tres años mayor que yo. Como dice el refrán, la mujer mayor de tres años abraza el ladrillo de oro. Hablamos durante medio año, y siempre fue bien. Ella a menudo me enviaba dinero para apoyarme en mis inversiones. Hoy, ella propuso que nos encontráramos, y dudé un poco. Dije: "Tienes familia, y yo soy más joven que tú, no se siente bien, ¿verdad?" Pero ella dijo que no había problema. Solo seremos amigos normales, así que acepté. Mis amigos saben que soy soltero, y como estoy un poco desesperado, no puedo preocuparme por la moral. Le pedí una foto, y se veía bastante bonita, agradable a la vista. Ella no vive lejos de mi ciudad, acordamos encontrarnos en una tienda de té de leche, sin elegir otro lugar por miedo a encontrar conocidos. Ese día llegué primero porque ella tenía que conducir durante varias horas. Mientras esperaba, miré las fotos y pensé que podría ser otra "escena de desastre" porque ahora la función de embellecimiento es demasiado poderosa. Pero cuando ella salió de ese Mercedes, la reconocí de inmediato, se veía mucho mejor que en las fotos, además era exactamente mi tipo preferido. Ella también me reconoció. Al encontrarnos, no sabía qué decir, para romper el hielo, ella sugirió un abrazo. Dije que estaba bien, su aroma era muy agradable, mi corazón latía rápidamente. Fuimos a una cafetería y luego a un restaurante a comer. Ella prácticamente no comió nada, todo el tiempo estaba pelando camarones para mí y sacando espinas de pescado. Después de comer, al salir del restaurante, naturalmente tomó mi mano, y yo no me resistí. Ella dijo que me llevaría a casa, y yo dije que podía tomar un taxi, pero ella insistió en llevarme, me dejó en la entrada del Gran Hotel Internacional de Nanshi. De repente, me preguntó qué pensaba de ese Mercedes. Yo, que ando en bicicleta eléctrica, ¿cómo podría decir algo malo? Luego me preguntó si quería uno. Pensé que estaba bromeando, así que dije que sí. Ella me jaló hacia ella y susurró en mi oído que si quería, podía comprar un poco de #insc ahora, no necesitaba mucho, con 10,000 monedas era suficiente.