Los fondos de pensiones están invirtiendo cada vez más en criptomonedas, marcando un cambio significativo en las finanzas tradicionales. Fondos importantes, como los de Michigan y el Reino Unido, están asignando recursos sustanciales a Bitcoin y Ethereum, principalmente a través de ETF de criptomonedas como los ofrecidos por Grayscale. Esta tendencia indica que las criptomonedas están superando los mercados de nicho y convirtiéndose en parte de las estrategias financieras convencionales.
El atractivo de Bitcoin radica en su reputación establecida como "oro digital", ofreciendo una estabilidad potencial contra la inflación. Por ejemplo, el fondo Cartwright del Reino Unido ha asignado el 3% de sus activos a Bitcoin, viéndolo como un equilibrio entre riesgo y potenciales altos rendimientos.
Mientras tanto, Ethereum está ganando terreno debido a su tecnología de blockchain y aplicaciones en finanzas descentralizadas (DeFi). El fondo de pensiones de Michigan ha invertido más de 11 millones de dólares en Ethereum a través de los ETF de ETH de Grayscale, destacando una estrategia de diversificación que incluye tanto a Bitcoin como a Ethereum.
Los ETF de criptomonedas proporcionan una forma regulada y accesible para que los fondos de pensiones inviertan en criptomonedas sin las complejidades de las tenencias directas. Este enfoque permite a los fondos beneficiarse de las ganancias del mercado cripto mientras minimizan los riesgos asociados con la gestión directa de activos.
Analistas como Eric Balchunas de Bloomberg enfatizan las ventajas de los ETF para la estabilidad y el crecimiento a largo plazo, otorgando credibilidad a esta tendencia de inversión. Sus opiniones sugieren que más fondos de pensiones podrían seguir pronto el mismo camino, integrando aún más las criptomonedas en las finanzas convencionales.