James Howells, el hombre británico que perdió su disco duro lleno de Bitcoins en un vertedero de Newport hace más de una década, ha presentado acciones legales contra el Ayuntamiento de Newport después de años de intentos infructuosos de recuperar el dispositivo.
El 12 de octubre, WalesOnline informó que Howells está buscando daños o permiso para excavar el vertedero para recuperar el disco duro, que contiene 8.000 Bitcoin (BTC), ahora valorado en más de 647 millones de dólares.
La acción legal, que ha atraído la atención internacional, llega después de años de reiteradas negativas por parte del Ayuntamiento de Newport a permitir a Howells buscar su disco duro.
Howells afirma que sus últimos esfuerzos por entablar negociaciones con el consejo de manera “amistosa y profesional” fueron rechazados, por lo que no le quedó otra opción que proceder con acciones legales.
El argumento de Howells
En comentarios exclusivos dados a Cointelegraph, Howells expresó su frustración por la negativa del consejo a reunirse con él, enfatizando sus intentos de resolver el asunto de manera amistosa:
“El consejo me ha negado el permiso para realizar una búsqueda o incluso se ha negado a aceptar una reunión en persona con los líderes del consejo para que podamos discutir la situación de buena fe durante más de 10 años”.
“Desafortunadamente, al no actuar de buena fe, el consejo no me ha dejado otra opción que iniciar procedimientos contra ellos”, explicó.
Howells cree que las preocupaciones medioambientales del consejo (citadas como la razón principal para denegar su solicitud de excavación) son infundadas.
Howells afirma haber presentado múltiples refutaciones a la postura del consejo, afirmando que el Ayuntamiento de Newport supuestamente ha incumplido las normas ambientales en los últimos años. Dice que esto está respaldado por "pruebas 100% verificadas de forma independiente".
“Si se observan los informes de cumplimiento de Natural Resources Wales de los últimos cuatro años, el Ayuntamiento de Newport ha estado incumpliendo su permiso de vertedero al filtrar arsénico, amianto, nitrato de amonio y gases metano en el medio ambiente local”.
Según Howells, su propuesta de proceso de excavación y remediación no solo recuperaría el disco duro, sino que también limpiaría el vertedero tóxico sin costo alguno para el consejo ni para los contribuyentes.
Howells dijo que ha contratado a FLI Group, una empresa que se especializa en la remediación de vertederos, para gestionar el proyecto. “FLI Group ha remediado múltiples vertederos en todo el Reino Unido, incluido un proyecto en Merthyr Tydfil. Tienen un gran conocimiento de las regulaciones ambientales y un historial probado de remediación exitosa de vertederos”, dijo.
Comprender las leyes del Reino Unido
Howells dijo que según la ley del Reino Unido, Bitcoin y otros activos digitales están clasificados como propiedad personal, lo que le da derecho a recuperar su disco duro perdido.
“El disco duro físico en sí no tiene ningún valor. Sin embargo, lo que sí tiene valor es la propiedad digital, la propiedad intelectual (los datos de la clave privada)”, afirmó.
“Existe una diferencia en la legislación del Reino Unido entre los dos tipos de propiedad. Mi demanda sostiene que tanto la propiedad física como la propiedad intelectual digital siguen siendo de mi absoluta propiedad, por lo que, según la ley, se me debería conceder permiso para recuperar dicha propiedad. O si el propietario del terreno sigue negándome el acceso para recuperar mi propiedad legalmente poseída, entonces debería compensarme por el valor de dicha propiedad”.
El Ayuntamiento responde
Sin embargo, el Ayuntamiento de Newport se ha mantenido firme en su postura.
Una declaración emitida el 11 de octubre y compartida con Cointelegraph por un portavoz del consejo reiteró su posición de que la excavación del vertedero no es posible según los permisos ambientales actuales:
“El consejo le ha dicho al Sr. Howells en múltiples ocasiones que la excavación no es posible según nuestro permiso ambiental y que ese trabajo tendría un enorme impacto ambiental negativo en el área circundante”.
El consejo desestimó las referencias de Howells a cuestiones de cumplimiento ambiental como un intento de desviar la atención de lo que llama una "afirmación fundamentalmente débil". La declaración agregó que responder a las reiteradas solicitudes de Howells le ha costado al consejo y a los contribuyentes tiempo y dinero que podrían haber sido mejor gastados en servicios locales.
“Nuestro régimen de monitoreo e informes no está relacionado con la afirmación del Sr. Howells, y creemos que su mención no es más que un intento de desviar la atención de una afirmación fundamentalmente débil, a la que nos resistimos vigorosamente”, agregó el portavoz.
El consejo sigue siendo el único organismo autorizado para realizar operaciones en el vertedero e insiste en que los riesgos asociados con la excavación superan con creces cualquier beneficio potencial.
Aspectos legales por delante
El caso de Howells será escuchado en el tribunal el 3 de diciembre, cuando un juez decidirá si el Ayuntamiento de Newport debe permitirle el acceso al vertedero o compensarlo por el valor del Bitcoin perdido.
Howells sigue teniendo esperanzas de obtener un resultado favorable y cita su derecho legal a recuperar la propiedad digital como su argumento más fuerte.
“Mi situación no ha cambiado mi opinión sobre las criptomonedas”, dijo Howells.
“Sigo promoviendo y defendiendo Bitcoin como un sistema de dinero electrónico entre pares, y espero plenamente que siga teniendo éxito en el futuro, tanto en términos de adopción mundial como de precio de mercado”.
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