En los mercados de criptomonedas y de valores, existen varios métodos que utilizan los operadores para maximizar sus ganancias potenciales, siendo el trading al contado y el trading con margen dos de los más populares. Ambas estrategias tienen diferentes propósitos, conllevan riesgos únicos y están dirigidas a operadores con diferentes niveles de tolerancia al riesgo y objetivos. A continuación, presentamos una comparación completa para ayudarlo a comprender las principales diferencias y ventajas de cada una.

1. Definición

  • Operaciones al contado: las operaciones al contado implican la compra y venta de instrumentos financieros (como criptomonedas, acciones o materias primas) al precio actual del mercado, denominado "precio al contado". Cuando un operador compra un activo en el mercado al contado, es propietario absoluto del activo y la transacción se liquida de inmediato o en un plazo breve.

  • Operaciones con margen: las operaciones con margen permiten a los operadores tomar fondos prestados de un corredor o de una bolsa para operar posiciones más grandes que su inversión inicial. Esto se hace mediante apalancamiento, que amplifica las ganancias potenciales pero también aumenta las pérdidas potenciales. Los fondos prestados están garantizados por los activos del operador y, por lo general, se cobran intereses sobre el monto prestado.

2. Propiedad

  • Operaciones al contado: en las operaciones al contado, los operadores son dueños de los activos que compran. Por ejemplo, si compra Bitcoin en un mercado al contado, conserva el Bitcoin real en su billetera y puede transferirlo, almacenarlo o usarlo como desee.

  • Operaciones con margen: en las operaciones con margen, los operadores no poseen el valor total del activo que están negociando a menos que devuelvan la totalidad de los fondos prestados. Controlan efectivamente una posición más grande al tomar fondos prestados, pero no tienen la propiedad directa de toda la posición.

3. Apalancamiento

  • Operaciones al contado: en las operaciones al contado no existe apalancamiento. Los operadores solo pueden operar con los fondos que tienen disponibles, lo que limita el riesgo de perder más de lo que invierten.

  • Operaciones con margen: las operaciones con margen permiten a los operadores utilizar el apalancamiento, lo que significa que pueden pedir prestado capital para aumentar su exposición a un activo. Los índices de apalancamiento habituales varían de 2:1 a 100:1, según la plataforma. Si bien esto amplifica las posibles ganancias, también magnifica las posibles pérdidas y los operadores pueden perder más que su inversión inicial.

4. Exposición al riesgo

  • Operaciones al contado: el riesgo se limita a la cantidad de capital invertido. Como no hay endeudamiento, el peor escenario posible es perder el valor total del activo adquirido si su valor cae a cero.

  • Operaciones con margen: el riesgo es significativamente mayor debido al apalancamiento. Si una operación se mueve en contra del operador, este podría perder más que su depósito inicial (también llamado "margen"). Se pueden activar llamadas de margen, lo que obliga a los operadores a agregar más fondos para mantener sus posiciones o enfrentar una liquidación forzosa.

5. Costos de intereses

  • Operaciones al contado: no hay costos de interés en las operaciones al contado. Una vez que se compra un activo, no hay tarifas constantes aparte de las posibles tarifas de transacción en las bolsas.

  • Operaciones con margen: dado que las operaciones con margen implican tomar fondos prestados, los operadores suelen pagar intereses sobre el monto prestado. Cuanto más tiempo se mantenga una posición, más intereses se acumulan, lo que aumenta el costo de la operación.

6. Flexibilidad comercial

  • Operaciones al contado: las operaciones al contado son sencillas y menos complicadas, lo que las hace ideales para inversores a largo plazo y para quienes prefieren correr menos riesgos. Los operadores pueden comprar activos y mantenerlos sin preocuparse por el reembolso de préstamos o los riesgos de liquidación.

  • Operaciones con margen: las operaciones con margen ofrecen más flexibilidad a los operadores activos que desean sacar provecho de los movimientos del mercado a corto plazo. Los operadores pueden beneficiarse de los movimientos de precios tanto al alza como a la baja al comprar o vender activos prestados. Sin embargo, la complejidad y los riesgos aumentan con el apalancamiento.

7. Potencial de ganancias

  • Operaciones al contado: el potencial de ganancias en operaciones al contado está directamente relacionado con la apreciación del mercado. Las ganancias o pérdidas del operador se basan en el movimiento del precio del activo, sin apalancamiento que amplifique las ganancias o pérdidas.

  • Operaciones con margen: el potencial de ganancias es mucho mayor debido al apalancamiento. Un pequeño movimiento de precio a favor del operador puede generar grandes ganancias porcentuales. Sin embargo, lo mismo ocurre con las pérdidas, que pueden amplificarse rápidamente si el mercado se mueve en la dirección opuesta.

8. Sincronización del mercado

  • Operaciones al contado: las operaciones al contado suelen favorecer las estrategias a largo plazo y dependen menos de la sincronización perfecta. Los inversores pueden conservar sus activos durante la volatilidad del mercado sin la presión inmediata de una llamada de margen.

  • Operaciones con margen: el momento oportuno es fundamental en las operaciones con margen. Las fluctuaciones de precios a corto plazo pueden afectar drásticamente la posición debido al apalancamiento. Una mala elección del momento oportuno o la volatilidad del mercado pueden dar lugar rápidamente a una liquidación si el margen del operador cae por debajo de los niveles requeridos.

9. Idoneidad

  • Operaciones al contado: adecuadas para principiantes, inversores a largo plazo y personas con menor tolerancia al riesgo. Dado que solo opera con su capital, existe un menor riesgo de perder más de lo que invierte.

  • Operaciones con margen: adecuadas para operadores con más experiencia que comprenden los riesgos del apalancamiento. Requiere una mayor tolerancia al riesgo, una gestión disciplinada del riesgo y un seguimiento minucioso de las operaciones.

Conclusión

Tanto el trading al contado como el trading con margen tienen su lugar en los mercados financieros, y cada uno de ellos se adapta a distintos tipos de operadores y estrategias de inversión. El trading al contado suele ser más seguro, lo que lo hace ideal para principiantes y para quienes buscan mantener activos a largo plazo. El trading con margen, por otro lado, ofrece la posibilidad de obtener mayores ganancias, pero conlleva mayores riesgos, lo que lo hace adecuado para operadores experimentados que comprendan el apalancamiento y la gestión de riesgos. Al decidir entre el trading al contado y el trading con margen, tenga en cuenta su tolerancia al riesgo, su conocimiento del mercado y sus objetivos de inversión. Si bien el trading con margen puede ser gratificante, exige un mayor nivel de vigilancia y experiencia para evitar pérdidas significativas.