Un informe reciente de las Naciones Unidas revela que Telegram se ha convertido en una plataforma clave para las actividades delictivas en el sudeste asiático. Los grupos delictivos están utilizando el software de chat encriptado para lavar dinero, cometer fraudes e intercambiar datos robados con facilidad. La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito estima que estas actividades generan miles de millones de dólares al año. Telegram ha transformado el panorama del crimen organizado, permitiendo que los sindicatos operen con una supervisión mínima. La plataforma se utiliza para vender malware, software deepfake y comercializar información confidencial como datos de tarjetas de crédito. El aumento de los intercambios de criptomonedas no registrados en Telegram complica aún más la situación, facilitando el movimiento de fondos ilícitos. La detención del fundador de Telegram, Pavel Durov, ha provocado debates sobre la responsabilidad de las empresas tecnológicas en la lucha contra las actividades ilegales. El informe advierte sobre el uso cada vez mayor de tecnologías avanzadas por parte de las organizaciones delictivas, lo que plantea desafíos para la aplicación de la ley. En general, los hallazgos destacan la necesidad urgente de abordar la creciente presencia delictiva en Telegram para salvaguardar los datos de los usuarios y la seguridad pública. Lea más noticias generadas por IA en: https://app.chaingpt.org/news