HAMSTR tiene una oferta abrumadora de 120 mil millones de tokens en circulación y, a pesar de que se habla de una reserva de "Fase 2", parece más una táctica para mantener a los inversores interesados mientras el equipo se prepara para cobrar. Esta enorme oferta dificulta que el token gane valor, lo que es una señal de alerta para muchos traders.
La confianza de la comunidad es otro problema. La prohibición de miembros legítimos por infringir las normas ha socavado la confianza, y esto podría conducir a una ola de ventas, lo que haría que el precio bajara aún más. Si a eso le sumamos la falta de entusiasmo previo al lanzamiento, lo que significa que HAMSTR podría enfrentar un comienzo decepcionante, lo que incitaría a los primeros inversores a deshacerse de sus tokens.
Por último, HAMSTR no ofrece mucho valor real ni propósito. Con un equipo anónimo, una hoja de ruta vaga y una participación mínima, el proyecto carece de credibilidad. En cambio, otros proyectos como FLIP y BONE tienen una utilidad sólida y comunidades activas, lo que los convierte en inversiones más fiables. Teniendo en cuenta todo esto, vender tu HAMSTR ahora podría ser una decisión inteligente antes de que la situación empeore.