El repunte que está experimentando actualmente la plata, con un aumento de precios del 36% en lo que va de año, puede interpretarse como una preparación del mercado para una próxima crisis macroeconómica. Según los analistas de Kobeissi Letter, un comentario sobre los mercados de capitales globales, la similitud entre el comportamiento del índice de precios al consumidor (IPC) en 2020 y en la década de 1970 indica que este podría ser el caso.

Si bien las acciones han subido en este contexto económico, la plata –y en menor medida el oro– se ha disparado, con precios que han subido un 80% durante los dos últimos años. La plata ha superado el rally del oro, cuyos precios aumentaron un poco más del 60% durante el mismo período.

Al evaluar estos repuntes y los elementos macroeconómicos que impulsan los mercados después de los recientes movimientos de la Reserva Federal, los analistas de Kobeissi afirmaron:

Con la implementación de un recorte de 50 puntos básicos por parte de la Reserva Federal y la expectativa de que los futuros aumenten varias veces más, ¿podría volver la inflación? Tal vez los mercados estén incorporando en sus precios una probabilidad importante de que la inflación regrese.

Otro factor que podría hacer subir los precios de la plata es la deuda pública nacional de Estados Unidos, que se espera que supere los 50 billones de dólares en 2030. La incertidumbre geopolítica también tiene un papel relevante en esta tendencia alcista, ya que la posibilidad de una recesión en 2025 sigue siendo del 50% y varios economistas advierten sobre los primeros signos que ya se están produciendo.

Otros creen que la plata podría ser más interesante que el oro para quienes buscan aprovechar los movimientos similares al oro pero con el objetivo de maximizar sus ganancias. “Los inversores que buscan ingresar al mercado de metales de inversión podrían encontrar la plata más atractiva debido a su precio más bajo en relación con sus máximos históricos”, explicaron los analistas de Saxo Bank.