Según CoinDesk, actualmente se está llevando a cabo una campaña de flexibilización monetaria coordinada a nivel mundial, en la que la mayoría de las clases de activos están experimentando un aumento. Sin embargo, Bitcoin sigue bajo presión y puede requerir más que modestos recortes de tasas antes de iniciar una nueva racha alcista.
Los bancos centrales occidentales, entre ellos la Reserva Federal, el Banco Central Europeo, el Banco de Inglaterra y el Banco de Canadá, han comenzado a recortar los tipos de interés. Se espera que la Reserva Federal inicie su primer ciclo de flexibilización desde 2019, con un posible recorte de tipos de 25 o 50 puntos básicos la semana próxima. Japón, por su parte, ha dado los primeros pasos hacia un ajuste, manteniendo un tipo de referencia de política monetaria del 0,25%, justo por encima de cero.
Los mercados tradicionales han reaccionado como se esperaba, con un fuerte aumento de los precios de las acciones, los bonos y el oro. A pesar de ello, el bitcoin no ha seguido su ejemplo. Aunque experimentó un repunte el viernes, su precio se mantiene por debajo de los 60.000 dólares, aproximadamente un 20% por debajo de su máximo histórico de más de 73.500 dólares alcanzado hace seis meses.
El rendimiento del bitcoin ha sido dispar. A pesar de un retroceso significativo desde marzo, sigue subiendo más del 40% en lo que va de año y un 127% con respecto a los niveles del año anterior. Este bajo rendimiento puede ser un respiro temporal después de un movimiento alcista sustancial. Sin embargo, si se observa durante un período más largo, el precio actual del bitcoin es inferior al máximo alcanzado hace casi tres años, de 69.000 dólares. Teniendo en cuenta la rápida inflación de estos años, el rendimiento del bitcoin parece incluso menos favorable, especialmente si se lo considera una cobertura contra la inflación. En cambio, el S&P 500 ha subido alrededor de un 33% y el oro ha aumentado más del 50% durante el mismo período.
Steno Research destacó que Bitcoin no ha experimentado muchos ciclos de reducción de tasas, y el más notable comenzó en 2019. Durante ese período, Bitcoin cayó aproximadamente un 15% desde el primer recorte de tasas de la Fed en agosto hasta fines de noviembre, momento en el que la Fed había reducido las tasas en 75 puntos básicos. No fue hasta el importante impulso monetario de la era Covid en marzo de 2020 que Bitcoin comenzó su ascenso meteórico.
Una serie breve de recortes de tasas modestos puede tener poco impacto en el precio de Bitcoin. En cambio, podrían ser necesarias medidas más amplias y de emergencia por parte de los bancos centrales para desencadenar una nueva racha alcista.