La zona de confort no siempre será cómoda
Todo el mundo tendrá este sentimiento: cuando nos sentimos cómodos y relajados en un determinado entorno durante demasiado tiempo, estamos menos dispuestos a realizar cambios y avances, y estamos menos dispuestos a imaginar cómo surgirán las dificultades.
La gente tiene más miedo de quedarse en el mismo lugar y poner límites a sus vidas, es como dibujar un muro a modo de prisión y pierden más posibilidades.
Las zonas de confort, si se dejan demasiado tiempo, pueden convertirse en un caldo de cultivo para la inercia. Es posible que obtengamos un consuelo temporal, pero a expensas del futuro.
Codiciar ciegamente la calidez de tu zona de confort puede minar tu espíritu de lucha. Dibuja el círculo de la vida más grande y, cuando mires hacia atrás en el futuro, contendrá un contenido más amplio y rico, en lugar de los arrepentimientos de "eres joven y no trabajas duro".
----Extraído del Diario del Pueblo