Cuando el mercado de criptomonedas está en un estado de miedo extremo, normalmente ocurre lo siguiente:
Caída de precios: una venta masiva significativa conduce a caídas bruscas de precios.
Reducción del volumen de operaciones: disminución de la actividad comercial y menor liquidez.
Aumento de la volatilidad: oscilaciones bruscas de precios debido a operaciones reactivas.
Huida hacia la seguridad: movimiento de fondos hacia activos estables como las monedas estables o los refugios seguros tradicionales.
Indicadores de sentimiento del mercado: valores bajos en herramientas como el índice de miedo y codicia.
Influencia de los medios de comunicación y las redes sociales: amplificación del miedo a través de noticias y publicaciones negativas.
Oportunidad para los inversores contrarios: algunos lo ven como una oportunidad de compra.
Impacto en nuevas inversiones: dificultad para atraer financiación para nuevos proyectos e ICO.
Inquietudes regulatorias: el miedo se intensifica por la incertidumbre regulatoria o los acontecimientos negativos.
Impacto psicológico: toma de decisiones irracional, como la venta por pánico.