Tengo un amigo que ha estado operando con criptomonedas durante cinco años y ahora ha logrado la independencia financiera. El mercado de las criptomonedas es notoriamente de alto riesgo. Se enfrentó a la liquidación varias veces, pero logró recuperarse en todas las ocasiones. Para respaldar sus esfuerzos comerciales, repartía comida, conducía para Didi e incluso trabajaba en obras de construcción. Fue increíblemente duro, pero nunca se rindió.

Hoy es dueño de dos pisos de lujo en Shanghai, conduce un Lamborghini y un Cullinan y tiene una novia de unos 60 años. Su viaje es un testimonio de resiliencia y determinación frente a desafíos extremos.