A medida que se acerca la medianoche del 20 de diciembre de 2024, el gobierno de Estados Unidos se enfrenta a un posible cierre a menos que el Congreso apruebe un proyecto de ley de financiación. A pesar de las frenéticas negociaciones, los desacuerdos sobre los recortes de gastos y los límites de endeudamiento han estancado el progreso, dejando las operaciones federales en la cuerda floja.
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La situación actual
Recientemente, la Cámara de Representantes rechazó un proyecto de ley de financiación en una votación de 174 a 235. Las negociaciones han contado con una importante influencia del presidente electo Donald Trump, que aboga por mayores límites de endeudamiento, y de Elon Musk, que ha enfatizado la necesidad de recortes agresivos del gasto. Si no se llega a una solución, casi un millón de empleados federales podrían enfrentar licencias o trabajo no remunerado. Mientras tanto, la TSA ha advertido de graves interrupciones en los viajes de vacaciones debido a la reducción de personal, lo que aumentará aún más la ansiedad pública y económica.