Facebook, ahora conocida como Meta (NASDAQ: META), recibió el rechazo de un juez estadounidense por su intento de desestimar una demanda presentada por la minera australiana. La demanda presentada por Andrew Forrest acusa a Meta de negligencia al permitir anuncios fraudulentos en Facebook. Esto incluye presentar falsamente a Forrest promocionando criptomonedas falsas y otras inversiones fraudulentas.

Meta no puede esquivar esto

Según los informes, el juez de distrito estadounidense Casey Pitts dictaminó el lunes que Forrest podía continuar con sus reclamos sobre la negligencia de Meta al permitir que los anuncios incumplieran su deber de operar de una manera comercialmente razonable. 

Esto sugiere que Forrest puede seguir adelante con las acusaciones de que Meta se apropió indebidamente de su nombre y semejanza. Esto no se limita sólo a los estafadores detrás de los anuncios falsos.

Pitts afirmó que “el Dr. Forrest afirma que Meta se benefició más de los anuncios que incluían su imagen que si no lo hubieran hecho”. Añadió: "Esto es suficiente para alegar adecuadamente que la supuesta apropiación indebida fue en beneficio de Meta".

Este tipo de fraudes y estafas han aumentado con el tiempo en la plataforma de redes sociales. Estas campañas han resultado en miles de millones de dólares en botín durante los últimos 5 a 10 años.

¿Cuál es el argumento aquí?

En su defensa, Meta había argumentado que la Sección 230 de la Ley federal de Decencia en las Comunicaciones lo protegía de responsabilidad como editor de contenido de terceros. Sin embargo, el juez señaló que las afirmaciones de Forrest plantean una disputa fáctica. Se trata de si los sistemas publicitarios de Meta eran herramientas neutrales o si las propias herramientas contribuyeron al contenido de los anuncios fraudulentos.

Forrest afirmó que aparecieron más de 1.000 anuncios fraudulentos en Facebook en Australia entre abril y noviembre de 2023. Esto resultó en pérdidas de millones de dólares para las víctimas. La revista Forbes estima el patrimonio neto de Forrest en 16.500 millones de dólares (24.800 millones de dólares australianos).

En su declaración, Forrest calificó la decisión del juez como una “victoria estratégica crucial” al responsabilizar a Facebook por sus prácticas publicitarias. Forrest busca daños tanto compensatorios como punitivos.

Este caso marca el primer caso en el que una empresa de redes sociales no pudo invocar la inmunidad de la Sección 230 en un caso civil estadounidense relacionado con su negocio publicitario, según Forrest. Anteriormente, los fiscales australianos se negaron a presentar los cargos penales que Forrest había presentado contra Meta en Australia por los anuncios criptográficos fraudulentos.