Puede que Bitcoin sea el pionero de las criptomonedas, pero desde entonces han surgido muchas alternativas, conocidas como altcoins. Ethereum, por ejemplo, ofrece funcionalidad de contrato inteligente, lo que permite a los desarrolladores crear aplicaciones descentralizadas (dApps) en su blockchain. Ripple se centra en facilitar pagos transfronterizos en tiempo real. Cada altcoin tiene diferentes propósitos, aborda diversas limitaciones o agrega nuevas características al ecosistema de criptomonedas. Los inversores suelen diversificar sus carteras con una combinación de Bitcoin y altcoins para equilibrar los riesgos y recompensas potenciales. 🪙📊💡