La caída de las altcoins el 2 de junio de 2024 se puede atribuir a varios factores clave. En primer lugar, se anunció una importante regulación gubernamental, destinada a restringir el uso de criptomonedas en varias de las principales economías mundiales. Estas nuevas regulaciones crearon incertidumbre en los mercados, lo que llevó a los inversores a retirarse.
En segundo lugar, bitcoin, la criptomoneda dominante, también ha experimentado una caída significativa debido a las nuevas presiones regulatorias y las crecientes preocupaciones sobre su impacto ambiental. Las altcoins, que a menudo siguen las tendencias de bitcoin, también se vieron afectadas por esta caída.
En tercer lugar, un importante ataque de piratería a un importante intercambio provocó una pérdida sustancial de fondos para muchos usuarios. Este incidente reavivó las preocupaciones sobre la seguridad de las criptomonedas, lo que provocó una venta masiva de varias altcoins.
En cuarto lugar, una serie de publicaciones negativas en los medios, incluidos informes de estafas y fraudes asociados con altcoins, han exacerbado la desconfianza de los inversores. Esta ola de escepticismo provocó liquidaciones de posiciones por temor a nuevas pérdidas.
Por último, la situación macroeconómica general, marcada por una creciente incertidumbre en los mercados financieros tradicionales, ha empujado a los inversores a favorecer activos más seguros, lo que ha contribuido a la liquidación generalizada de altcoins. Estos factores combinados explican la fuerte caída de las altcoins en la actualidad.