Puede parecer poco probable que Bitcoin se inspire en otra cadena de bloques, ya que fue la pionera. Bitcoin inspiró Litecoin, Dogecoin, Monero y Ethereum, entre otros.
Sin embargo, en los últimos 15 años, la industria ha evolucionado significativamente.
Si bien el dominio de Bitcoin se mantiene, el enfoque ha pasado de simples estrategias de “comprar y mantener” a diversos métodos de implementación de activos digitales para obtener rendimiento, ingresos y entretenimiento.
La mayor parte de esta innovación proviene de Ethereum y su ecosistema de múltiples tokens y múltiples cadenas. Ahora, la tendencia está volviendo a Bitcoin.
Con la introducción de soluciones de capa 2, tokens nativos, tokens no fungibles (NFT) y protocolos de finanzas descentralizadas (DeFi), Bitcoin tiene el potencial de ver un crecimiento significativo en usuarios activos, valor total bloqueado (TVL) y billeteras activas.
¿Puede Bitcoin replicar el crecimiento que experimentó Ethereum en 2017 y 2020, impulsado por las ofertas iniciales de monedas y DeFi? Al adoptar ciertas características de Ethereum, Bitcoin podría experimentar un crecimiento exponencial.
Una característica clave es la interoperabilidad. El éxito de Ethereum con el multitokenismo se debe en parte a estándares universales como los ERC-20, que son fácilmente transferibles entre cadenas EVM.
Bitcoin, sin embargo, enfrenta problemas con los estándares de tokens y los métodos de inscripción que compiten, lo que hace que su ecosistema sea más complejo.
Bitcoin tiene varios estándares de emisión de tokens en competencia y un complejo ecosistema L2. Stacks es el Bitcoin L2 más grande, seguido por Lightning Network, entre muchos otros.
Para que Bitcoin se convierta en un centro para DeFi, NFT, activos del mundo real (RWA) y otros usos en cadena, debe adoptar estándares universales que faciliten una transferencia de valor fluida entre cadenas.
Si los desarrolladores de Bitcoin colaboran en lugar de trabajar de forma aislada, su ecosistema podría crecer significativamente en métricas como usuarios activos diarios y TVL.
El TVL de Bitcoin de 1.150 millones de dólares está muy por detrás de los 65.000 millones de dólares de Ethereum.
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Sin embargo, el TVL actual de Bitcoin es similar al de Ethereum justo antes del "verano DeFi", lo que sugiere un potencial de rápido crecimiento.
En 2016, comenzó la moda de las ICO de Ethereum y, en 2017, más del 75% de los criptoactivos se basaban en Ethereum. Para 2020, Ethereum cambió su enfoque hacia DeFi y NFT.
Aunque el sector NFT de Ethereum ha disminuido, los Ordinals de Bitcoin han ganado terreno, lo que indica un cambio de marca en lugar de una disminución de los NFT.
El aumento de los tokens BRC-20 y la actividad de la red sugiere que Bitcoin podría experimentar patrones de crecimiento similares a los de Ethereum en 2018. Con más de 14.000 tokens construidos en Bitcoin, la percepción de los usuarios sobre el valor de BTC aumenta.
Bitcoin podría estar al borde de una ruptura parabólica, con una capitalización de mercado de los tokens BRC-20 superior a los 2 billones de dólares y un crecimiento significativo de las inscripciones.
Los desarrolladores de Bitcoin deberían aprender de las innovaciones de Ethereum para fomentar un crecimiento exponencial. A pesar de los posibles desafíos regulatorios, incluso un crecimiento modesto podría aumentar significativamente el valor de Bitcoin.
Al adoptar estrategias exitosas de Ethereum, Bitcoin podría transformarse en el ecosistema multitoken más grande del mundo para 2025.
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