Según Foresight News, los ciudadanos estonios Sergei Potapenko e Ivan Turõgin comparecieron ayer por primera vez ante el tribunal, según informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ). Se les acusa de operar un servicio fraudulento de minería de criptomonedas, HashFlare, de 2015 a 2019. El Departamento de Justicia alega que engañaron a cientos de miles de víctimas para que invirtieran más de 550 millones de dólares, y que las acciones mineras prometidas nunca se materializaron.

En otro plan en mayo de 2017, Potapenko y Turõgin recaudaron al menos 25 millones de dólares invirtiendo en la empresa Polybius. Afirmaron que la empresa establecería un banco de moneda virtual. A pesar de la promesa de Polybius de distribuir dividendos de sus ganancias, el banco nunca se estableció y la mayoría de los fondos supuestamente fueron transferidos a cuentas controladas por los acusados.

El Departamento de Justicia alega además que los dos lavaron dinero a través de empresas fantasma, contratos falsos y facturas utilizadas para comprar 75 propiedades, seis autos de lujo, billeteras de criptomonedas y miles de máquinas mineras. Se enfrentan a cargos de conspiración para cometer fraude electrónico, 16 cargos de fraude electrónico y conspiración para lavar dinero, y cada cargo conlleva una pena máxima de 20 años de prisión.