Los NFT, o tokens no fungibles, han revolucionado la forma en que vemos la propiedad digital. Una de las mejores cosas de las NFT es cómo democratizan la propiedad del arte, la música y otros activos digitales. Permiten a los creadores valorar su trabajo de una manera completamente nueva, garantizando autenticidad y propiedad exclusiva para los compradores. Además, las NFT tienen el potencial de crear nuevas oportunidades de ingresos para artistas y creadores, allanando el camino para modelos comerciales más inclusivos y sostenibles. También pueden facilitar una conexión directa entre los creadores y sus fans, creando una comunidad más fuerte en torno al trabajo creativo.