Cuando estás a punto de recuperar tu dinero, el repunte se detiene bruscamente.
Cuando obtienes ganancias y sales, surge un caballo oscuro.
Cuando te vuelves complaciente, el colapso seguirá.
Cuando estás arruinado, hay buenas monedas por todas partes.
Amigo, ¿en qué etapa estás?