Cuando observé la reciente caída en el valor de Bitcoin, sentí como si fuera una validación de mis pronósticos de larga data.
Anteriormente había advertido sobre la posibilidad de que el mercado de las criptomonedas experimente tal período correctivo.
Mis análisis habían señalado una volatilidad excesiva y riesgos inherentes en el mercado de las criptomonedas, y esta caída simplemente confirmó esos argumentos. Como defensor de la diversidad de carteras, siempre he enfatizado la importancia de la diversificación para mitigar pérdidas extremas ante circunstancias imprevistas.
Por lo tanto, si bien la caída de Bitcoin puede haber tomado a muchos con la guardia baja, para mí fue solo otro recordatorio de que la cautela al invertir siempre está justificada.
