Bitcoin ha experimentado su cuarta reducción a la mitad, un hito que no sólo afecta a los mineros sino que también resuena en todo el ecosistema del mercado. En este último evento de reducción a la mitad, la recompensa en bloque para los mineros se redujo a la mitad de 6,25 BTC a 3,125 BTC, reduciendo efectivamente la emisión diaria de Bitcoin de alrededor de 900 BTC a 450 BTC. Este recorte programado de la oferta es una característica central del modelo económico de Bitcoin diseñado para crear escasez y potencialmente hacer subir el precio con el tiempo.

Esta cuarta época marca un punto significativo en el cronograma de *BTC*, alcanzando aproximadamente el 93,75% de su suministro total planificado de 21 millones de BTC minados. La escasez ahora reemplaza a la de activos tradicionales como el oro, destacando la propuesta de valor única de Bitcoin como reserva digital de valor. A medida que nos adentramos en esta nueva era, las implicaciones de estos cambios son enormes y afectan todo, desde la rentabilidad de la minería hasta la dinámica general del mercado.

Implicaciones económicas de la reducción del suministro de Bitcoin

La reducción de la emisión de Bitcoin altera fundamentalmente el panorama tanto para los mineros como para los inversores. Los mineros enfrentan una caída del 50% en las recompensas en bloque, lo que podría desafiar la rentabilidad de operaciones menos eficientes. Sin embargo, esta disminución de la oferta a menudo crea un sentimiento alcista entre los inversores a medida que el activo se vuelve más escaso. Históricamente, estos eventos han precedido a importantes corridas alcistas en el mercado de Bitcoin, aunque la magnitud y el momento de estas corridas pueden variar mucho.

Además, la reducción a la mitad reduce la tasa de inflación anual de Bitcoin a alrededor del 0,85%, una cifra que ahora socava la tasa de emisión de oro en estado estacionario. Este hito posiciona a Bitcoin como un activo aún más deflacionario que el oro, que ha sido una cobertura contra la inflación durante siglos. El cambio no sólo afecta la percepción de los inversores sino que también consolida el papel de Bitcoin en la era digital como una posible salvaguardia contra la inflación.

Se ha producido el cuarto#BitcoinHalving, lo que ha provocado una reducción del 50% en la inflación de la oferta y un aumento inherente en la escasez de emisiones. En esta edición, exploramos la evolución de la red Bitcoin a lo largo de las épocas con respecto al desempeño de los precios y la red fundamental... pic.twitter.com/3W0SbWw21f

– glassnode (@glassnode) 23 de abril de 2024

Dinámica del mercado y sentimiento de los inversores después del halving

A pesar de la reducida tasa de entrada de nuevos Bitcoin en circulación, el impacto general en la liquidez del mercado es relativamente menor. Esto se debe a que la cantidad de Bitcoin extraída diariamente queda eclipsada por el volumen comercializado y la oferta total que ya está en circulación. No obstante, la reducción a la mitad es un acontecimiento importante que tiende a atraer interés especulativo y puede provocar una mayor volatilidad del mercado.

El sentimiento de los inversores antes y después del halving ha mostrado tendencias positivas. En particular, el mercado ha experimentado un nuevo máximo histórico (ATH) antes de esta reducción a la mitad, la primera vez en la historia de Bitcoin en ese momento. Esto sugiere una fuerte demanda subyacente, impulsada aún más por el lanzamiento de nuevos productos financieros como los ETF al contado, que han ampliado el acceso a Bitcoin para inversores institucionales y minoristas.

Además, los datos históricos de Glassnode sugieren que, si bien los años posteriores al halving a menudo han ido acompañados de aumentos sustanciales de precios, también provocan una volatilidad considerable, incluidas profundas caídas. Este patrón subraya la necesidad de que los inversores se mantengan cautelosos, equilibrando el entusiasmo por reducir a la mitad los eventos con la posibilidad de que se produzcan cambios repentinos en el mercado.