Ay, hay que vivir. Ya no quiero vivir. Soy un completo desperdicio. Sólo puedo fumar, beber y dormir. No puedo hacerlo con un salario alto. con un salario bajo. ¿Por qué no puedo hacerlo? No tengo suficiente para comer. Soy un desperdicio, es un desperdicio eliminado por la sociedad, una rata apestosa en la alcantarilla. abandonado por su familia y finalmente muerto congelado en silencio junto al basurero del callejón.