La IA ha generado un intenso debate sobre sus resultados en la economía entre economistas, formuladores de políticas y el público en general. Por un lado, algunos sostienen que la IA es el principal impulsor de la eficiencia y aumentará el crecimiento económico y el desarrollo. Por otro lado, sin embargo, algunos pusieron una señal de advertencia recordando que la correlación entre la IA y el mercado laboral y la estabilidad económica no es y muy probablemente seguirá siendo tan clara e impredecible.

Predicciones y realidades económicas

Investigaciones recientes y opiniones de especialistas sobre las oportunidades de empleo de la IA describen roles complejos. Un artículo de investigación del Fondo Monetario Internacional (FMI) revela que la proclamación de que los responsables políticos pueden celebrar haber derrotado la inflación causada por la IA es una suposición excesiva, lo que demuestra que los impactos futuros de la IA en los fundamentos económicos aún no se pueden comprender [1].

El mismo estudio realizado por el MIT también señala que las perspectivas de que la sustitución humana por la IA no sea tan útil como se supone porque la IA es bastante costosa tanto de aplicar como de mantener (2)

Recíprocamente, la fuerza laboral también es un aspecto importante. Goldman Sachs afirma que para 2030, el número de puestos de trabajo que la IA podría poner en peligro podría ascender a 300 millones, niveles de estrés intensos, más vigilancia, etc., y eso va a alterar la forma en que funcionan los mercados laborales globales.

Esto señala la posibilidad de que la IA pueda arrebatar oportunidades laborales a los trabajadores y, por lo tanto, disminuir los medios de vida en todo el mundo.

Oportunidades y riesgos

A pesar de los desafíos asociados con la IA, también tiene un inmenso potencial para la expansión económica y la operación del sistema. La herramienta puede procesar y trabajar rápidamente con grandes cantidades de datos gracias a su capacidad inigualable, lo que podría impulsar enormemente la productividad y, a su vez, la innovación.

Por ejemplo, los sistemas de inteligencia artificial se pueden utilizar en los sectores de atención médica, servicios financieros y logística para reformar la forma en que se prestan los servicios y cambiar completamente la eficiencia operativa.

Concluyen que, aunque la IA proporciona resultados maravillosos, debemos asegurarnos de que no sea demasiado abrumador, junto con sus riesgos, que incluyen información errónea, problemas de privacidad y su impacto en la desigualdad [5].

Es muy importante mostrar la eficacia de los planes constructivos que ayudan a aprovechar los beneficios de la IA a pesar de sus impactos negativos.

Consideraciones regulatorias y éticas

El surgimiento de llamados globales a favor de políticas de IA es un paso hacia la gestión de las implicaciones económicas de la IA. La elaboración de normas sobre IA en la Unión Europea, como pionera, se centra en desarrollar directrices éticas y de uso de la IA en todo el mundo, con esta iniciativa como precedente.

Estos principios podrían ser fundamentales para configurar un entorno propicio para el éxito de una economía impulsada por la IA y orientada al bienestar humano.

Aunque la IA ofrece muchas oportunidades económicas, no tiene la ciencia que la respalde, y los numerosos problemas que genera la economía de la IA hacen que sea inoportuno animar plenamente a la economía de la IA.

Será clave un enfoque equilibrado y bien informado, basado en el principio de mejorar el impacto económico de la IA y al mismo tiempo promover prácticas políticas que no sean perjudiciales para la sociedad.

Noticias obtenidas de koreajoongangdaily