No pasa una semana sin que otra empresa estadounidense quiebre o reciba una demanda de los reguladores. Es probable que el mayor beneficiario de esta implacable represión contra #cryptocurrencies sea Asia.

En los últimos meses ha quedado claro que el gobierno de Estados Unidos no quiere una industria próspera de activos digitales ni la innovación que la acompaña.

La confusión sobre la clasificación de activos y los jefes de las agencias federales disparando desde la cadera a cualquier cosa relacionada con la industria ha empeorado las cosas.