Los investigadores del Instituto de Atención Médica Digital Antienvejecimiento de la Universidad han dirigido una enorme revisión sistemática inclusiva sobre el efecto conversor de la inteligencia artificial (IA) en la ciencia de la nutrición, revelando un potencial asombroso y un toque ligero en los temas pendientes. El estudio, que se centró en aplicaciones de la IA que van desde la evaluación dietética hasta la predicción de enfermedades y la nutrición personalizada, ilustró cómo la IA desempeña un papel fundamental a la hora de cambiar la atención sanitaria actual y dar lugar a un futuro más beneficioso.

Aplicación de la IA en las ciencias nutricionales

La investigación que analiza los aspectos nutricionales de la dieta y cómo las tecnologías avanzadas, es decir, IA, ML y DL, pueden influir en los resultados nutricionales y brindar a los gerentes decisiones informadas para mejorar nuestra comprensión de los problemas de salud relacionados con la dieta, fue supervisada recientemente por Tagne Poupi Theodore Armand junto con sus colegas.

Los resultados demuestran la capacidad de la IA en campos importantes de la nutrición, como la elaboración de recomendaciones dietéticas adecuadas, la modificación de la ingesta de nutrientes y el tratamiento exitoso de enfermedades.

El episodio más destacado de Nutrition Review, entre otros, es el efecto de la IA en la personalización de la nutrición. Mediante la recopilación y el análisis de información de salud individual y de patrones dietéticos, la IA puede personalizar recomendaciones dietéticas que sean más exitosas tanto en el ámbito profiláctico como en el manejo de enfermedades, lo que, en este sentido, es más eficiente que los métodos tradicionales. Por ejemplo, los sistemas de IA son muy confiables a la hora de diseñar el menú nutricional personalizado en función de los rasgos genéticos, el estilo de vida y las condiciones de salud que acompañan a un individuo.

Evaluación e innovación

Aunque no se han pasado por alto los aspectos positivos de la IA, el estudio ha sacado a la luz algunos desafíos que actúan como obstáculos para la plena integración de esta herramienta en la ciencia de la nutrición. La calidad de los datos, las preocupaciones por la privacidad y el sesgo algorítmico se encuentran entre los principales demonios que deben eliminarse para permitir el uso adecuado y ético de la IA en la nutrición siempre que supongan una amenaza.

La complejidad de los datos dietéticos y la variedad de dietas más que limitada agravan el problema. Este problema debe resolverse con modelos de IA eficaces que se puedan ajustar fácilmente y brinden una imagen real de toda la información nutricional.

Las composiciones dietéticas difieren en complejidad entre individuos y entre individuos que viven en diferentes partes del mundo, lo que dificulta la construcción de modelos de IA que funcionen correctamente y puedan adaptarse y analizar una amplia variedad de datos nutricionales.

Se ha propuesto que los investigadores den prioridad al desarrollo de la objetividad, que responderá a las preguntas sobre la estandarización de los datos, la interpretabilidad de los modelos y la inclusividad de los sistemas de IA entre las diferentes regiones. Además, el uso ético de la tecnología de IA en nutrición adopta una privacidad de datos creíble y datos de consentimiento para que las personas, independientemente de su origen socioeconómico, puedan beneficiarse de la intervención nutricional basada en IA.

La necesidad de acciones coordinadas

El informe destaca que la colaboración interdisciplinaria es necesaria para una transición fluida de los descubrimientos de alta tecnología al desarrollo práctico de alimentos. Por lo tanto, es impresionante participar en el desarrollo de herramientas científicamente sólidas que sean prácticamente viables en esta era de la gestión de la salud mediante la colaboración de los conocimientos de especialistas en inteligencia artificial, nutricionistas, proveedores de atención médica y responsables de la formulación de políticas.

La IA se introduce en la atención sanitaria y la nutrición siguiendo una tendencia que está en alza. Instan al gobierno a apoyar la investigación que ayude a mejorar el rendimiento de la IA y, en última instancia, a eliminar sus limitaciones. Esto abrirá nuevas vías para integrar estas tecnologías de IA para transformar la nutrición en una disciplina de salud más precisa, personalizada y preventiva. Va un paso más allá al revisar los cambios que se producirían en las orientaciones dietéticas y en las personas adineradas de todo el mundo.

Con el desarrollo de la tecnología de inteligencia artificial, el papel de la ciencia nutricional en las intervenciones nutricionales está adquiriendo cada vez mayor importancia. Si se aplica de manera responsable e inclusiva, esto generará una sociedad en red sin desnutrición ni enfermedades.

Noticias citadas de la revista Nutrients