#BullorBear $BTC Euforia: Este es el pico del ciclo del mercado, donde los inversores se sienten extremadamente optimistas y confiados. Creen que los precios seguirán subiendo indefinidamente y pueden realizar inversiones arriesgadas basándose en esta creencia.

Complacencia: A medida que el mercado comienza a enfriarse, los inversores pueden volverse complacientes. Es posible que crean que el mercado alcista continuará, incluso si se producen algunos retrocesos menores.

Emoción: A medida que el mercado sigue subiendo, los inversores pueden empezar a sentir emoción. Pueden verse tentados a comprar más acciones con margen o a recomendar acciones a otros.

Creencia: A medida que el mercado comience a subir nuevamente, los inversores pueden comenzar a creer que el repunte es real. Es posible que inviertan más dinero en el mercado, creyendo que pueden obtener importantes beneficios.

Ansiedad: A medida que el mercado comienza a caer, los inversores pueden empezar a sentirse ansiosos. Quizás se pregunten si deberían vender sus acciones o si la caída es sólo temporal.

Negación: si el mercado continúa cayendo, los inversores pueden comenzar a sentir negación. Quizás crean que el mercado se recuperará pronto.

Esperanza: A medida que el mercado empieza a tocar fondo, los inversores pueden empezar a sentir esperanza. Es posible que crean que es posible una recuperación y que comiencen a comprar acciones nuevamente.

Pánico: si el mercado continúa cayendo, los inversores pueden empezar a entrar en pánico. Es posible que vendan sus acciones con pérdidas para evitar perder aún más dinero.

Capitulación: Este es el punto más bajo del ciclo del mercado, donde los inversores perdieron la esperanza y vendieron todas sus acciones.

Incredulidad: A medida que el mercado comienza a subir nuevamente, los inversores pueden sentir incredulidad. Es posible que no crean que el repunte sea real y que duden en volver a invertir.

Ira: si el mercado continúa subiendo, los inversores que vendieron sus acciones con pérdidas pueden empezar a sentirse enojados. Es posible que estén enojados consigo mismos por vender demasiado pronto, o pueden estar enojados con el mercado por subir sin ellos.

Depresión: Los inversores que perdieron mucho dinero en la caída del mercado pueden empezar a sentir depresión. Es posible que se sientan desesperanzados respecto del futuro y que abandonen por completo sus inversiones.