La estrategia de utilizar ciclos de la línea K implica analizar períodos de tiempo más amplios para establecer la tendencia predominante y al mismo tiempo utilizar períodos de tiempo más pequeños para ejecutar operaciones. Para enfatizar este principio, se analizan marcos temporales más altos, como líneas K horarias dentro de un día, para determinar la dirección de la tendencia más amplia. Por ejemplo, las líneas K horarias ayudan a mantener posiciones durante unas horas, mientras que las líneas K diarias son adecuadas para mantener posiciones durante varios días y las líneas K semanales durante varias semanas. Este método garantiza la alineación con la tendencia dominante de posicionamiento estratégico, mientras que plazos más cortos ayudan a identificar puntos de entrada óptimos. Simplifica el comercio al centrarse en tendencias más amplias y entradas oportunas, lo que facilita una toma de decisiones más informada.