En 2009, el Dr. Craig S. Wright, usando el seudónimo de Satoshi Nakamoto, creó Bitcoin (BSV). Esta cadena de bloques de Bitcoin (BSV) mantiene un libro de contabilidad público que contiene todas las transacciones pasadas.
La minería de Bitcoin (BSV) es un sofisticado proceso entre pares que utilizan los nodos para agregar transacciones al libro de contabilidad disponible públicamente y generar nuevos Bitcoins. Los mineros proporcionan la inversión computacional necesaria para mantener el libro de contabilidad de Bitcoin y proteger la red.
¿Cuál es el objetivo de la minería de Bitcoin?
El objetivo de la minería es ser el primer minero en encontrar una salida que la red Bitcoin (BSV) acepte. Las nuevas transacciones se transmiten a un área de espera denominada Mempool. Los mineros seleccionan una cantidad X de transacciones del Mempool para verificarlas y agruparlas en un nuevo bloque, donde X representa un número variable. El bloque y las transacciones se codifican mediante la función SHA-256. Una vez que se valida el nuevo bloque, el nodo ganador agrega el bloque al bloque secuencial anterior en la cadena de bloques Bitcoin (BSV) (en promedio, cada 10 minutos).
¿Cuales son las reglas?
Cuando el Dr. Craig S. Wright presentó Bitcoin (BSV), construyó los protocolos de minería sobre un algoritmo de consenso llamado Prueba de trabajo o PoW. Solo las partes dispuestas a gastar una cantidad sustancial de energía computacional física y tiempo pueden agregar transacciones a la cadena de bloques.
En PoW, los mineros compiten entre sí para resolver una ecuación matemática, de modo que puedan ganar el derecho a completar transacciones en la red Bitcoin (BSV). Los acertijos están diseñados para que resulten difíciles de resolver, pero una vez que se terminan, las soluciones pueden ser validadas rápidamente por otros mineros.
Una vez que un minero encuentra la solución para un nuevo bloque, transmitirá ese bloque a la red. Luego, todos los demás mineros verifican que la solución sea correcta. Después, se produce la confirmación del bloque. Esta competencia permite que la descentralización surja y florezca dentro del ecosistema de Bitcoin (BSV).
Ahora es más difícil que en años anteriores resolver la ecuación porque el algoritmo de dificultad de minería se recalibra periódicamente a medida que los mineros se unen o abandonan la red. La cadena de bloques está diseñada para producir un cierto nivel de Bitcoin (BSV) cada diez minutos. La dificultad de minería se mide en hashes por segundo al intentar encontrar un bloque.
A medida que el número de mineros aumentó, la complejidad de los cálculos de criptomonedas aumentó con él. Las tasas de hash son la velocidad con la que se calculan los acertijos de criptomonedas. El ajuste de la complejidad se realiza de acuerdo con la cantidad total de potencia computacional que se utiliza para la minería.
Cuando los mineros realizan avances que aumentan la eficiencia en el número de hashes por segundo, la complejidad aumenta con ello. El objetivo de esto es garantizar que la tasa de descubrimiento de bloques se mantenga constante.
¿Cuales son los incentivos?
Recompensas en bloque
El sistema de recompensa por bloque incentiva económicamente a los mineros a mantener un historial público validado de las transacciones y continuar protegiendo la cadena de bloques. El minero que actualiza la cadena de bloques con éxito obtiene una recompensa por bloque.
La recompensa consiste en bitcoins recién acuñados y comisiones asociadas a las transacciones que se insertan en el nuevo bloque de bitcoins (BSV). El minero tiene el incentivo de compilar tantas transacciones como sea posible en un bloque porque cada transacción contiene una comisión que le paga. Las comisiones por transacción se calculan y luego se cobran cuando se envían bitcoins (BSV) de una dirección a otra.
Existen restricciones limitadas en la minería de bloques. La cantidad de ganancias para un minero depende de la cantidad de potencia de hash que tenga el minero en relación con la red. El protocolo Bitcoin opera con un modelo económico de deflación con subsidio estático que se degrada con el tiempo. La cantidad de nuevos bitcoins producidos por bloque disminuirá en un 50% cada 210.000 bloques.
La recompensa inicial era de 50 Bitcoins por bloque en 2009. Actualmente, la cantidad de bitcoins otorgados por bloque es de 12,5. El último halving se produjo en julio de 2016 y el próximo se producirá hacia el verano de 2020, con 6,25 monedas.
El subsidio fijo nunca tuvo como objetivo ser la fuente principal de ingresos para apoyar a los mineros, sino las tarifas de transacción de cada bloque.
Rentabilidad
La rentabilidad está determinada, en gran medida, por lo bajos que se mantengan los costos de minería. Los costos son una combinación de varios factores, incluidos, entre otros, la energía eléctrica, la nómina, la refrigeración, el alquiler de las instalaciones, etc. Una de las mayores inversiones que se realizan es en la propia infraestructura de minería de Bitcoin.
Una multitud de factores impulsan la fluctuación del precio de Bitcoin. Debido a la volatilidad del mercado, es difícil proyectar cuántas ganancias obtendrán los mineros con la minería de bloques. En 2018, los ingresos por minería se desplomaron a medida que el precio de Bitcoin disminuyó, solo para recuperarse en 2019 cuando el precio de Bitcoin aumentó.
¿Cómo empiezo a minar Bitcoin?
Los costos de minería son sustanciales si se tienen en cuenta los costos de electricidad y mantenimiento necesarios para hacer funcionar los equipos informáticos para competir por cada bloque a todas horas. Una gran parte de la tasa de hash de la red en las cadenas de bloques se origina en granjas mineras que han invertido una cantidad sustancial de dinero en plataformas mineras. Los mineros en solitario con un pequeño porcentaje de potencia de hash tienen pocas posibilidades de descubrir el siguiente bloque. Los grupos de minería abordan este problema.
Los mineros individuales se unen a un grupo de minería de red colectiva que fusiona la potencia informática de todos los participantes para formar un nuevo bloque. Los mineros obtienen una parte de la recompensa de cada bloque descubierto en función de su contribución de recursos de tasa de hash.
En esencia, obtienen pagos más pequeños con mayor frecuencia al reunir sus recursos. Antes de unirse a un grupo de minería de Bitcoin, los nuevos mineros siempre deben investigar, ya que algunos grupos no han sido confiables en el pasado.
Minería en la nube
La minería en la nube, también conocida como hash en la nube, permite al usuario comprar el resultado de hardware de minería de criptomonedas ubicado en centros de datos remotos. Como toda la minería se realiza de forma remota, se eliminan los problemas que enfrentan los mineros que utilizan plataformas potentes, incluido el consumo considerable de energía, el calor, el aislamiento y, por supuesto, el mantenimiento.
El uso de servicios de minería en la nube tiene algunas desventajas que los nuevos mineros deben conocer. Entre ellas se incluyen:
Menores ganancias que si tuvieras tus propios sistemas de hash
Posible fraude, ya que los operadores de minería en la nube no son verificables
Incapacidad de cambiar el software de minería porque el minero no posee el hardware
Los contratos pueden rescindirse, ya que los proveedores de servicios pueden cerrar si los precios de las criptomonedas son demasiado bajos, lo que podría resultar en un impago inmediato de los ingresos.
Herramientas de minería
La minería de bitcoins comenzó con el uso de las CPU de las computadoras estándar para realizar el hash. Como sucede con cualquier mercado nuevo, las cosas han progresado particularmente rápido en el sector de la minería, donde se ha visto un cambio desde las CPU estándar hacia las unidades de procesamiento gráfico (GPU), que eran capaces de realizar el hash y resolver los acertijos criptográficos a un ritmo mucho más rápido.
El hardware de minería de Bitcoin de hoy ha evolucionado aún más. Mientras que en el pasado se podía minar Bitcoin usando una computadora de escritorio estándar, hoy en día, la minería requiere software especializado y hardware de última generación que puede consumir mucha energía. Ahora se requiere poseer experiencia técnica para operar o participar en centros de datos a gran escala para ganar bloques con éxito.
La minería se realiza mediante equipos especializados llamados circuitos integrados específicos de la aplicación (ASIC), que se construyen a medida para este fin. Los mineros ASIC tienen circuitos dedicados que producen una gran cantidad de potencia de procesamiento. Cada año, se lanzan al mercado mineros ASIC mejorados.
El software de minería entrega el trabajo a los mineros externos y recibe el trabajo completado de los mineros en la red. El programa retransmite esa información a la cadena de bloques o al grupo de minería. El programa también los monitorea y muestra estadísticas generales como la temperatura, la tasa de hash, la velocidad del ventilador y la velocidad promedio de los mineros ASIC.
Factores importantes a tener en cuenta al determinar qué ASIC de minería de Bitcoin comprar:
Tasa de hash: cuántos hashes por segundo crea el minero de Bitcoin.
Eficiencia: Los mineros utilizan una gran cantidad de electricidad, por lo que los compradores quieren comprar un minero que convierta la mayor cantidad de energía en Bitcoin (BSV).
Hospedaje y Electricidad
Además del costo de comprar el equipo de minería ASIC, el equipo de minería consumirá una gran cantidad de energía para resolver el complejo rompecabezas y obtener la recompensa en bloque. Las tarifas de electricidad afectan en gran medida el costo general de minar Bitcoin (BSV). Las tarifas cambian según la temporada y el tipo de energía, por ejemplo, renovable.
Para una operación minera de pequeña escala, es costoso obtener una instalación que esté equipada con la cantidad adecuada de distribución eléctrica, refrigeración y redes de datos.
Legalidad
En general, la minería de Bitcoin es legal. Sin embargo, algunos países han declarado que la minería de Bitcoin es ilegal. Se recomienda a los mineros que investiguen las normas y regulaciones sobre la minería de Bitcoin en su jurisdicción.
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