No le digas a nadie si eres un perdedor o un ganador. No le cuentes a nadie sobre el trading.
Si pierdes, se regodean contigo, y si ganas, te mienten o te codician, y si les cuentas sobre tus operaciones y él quiere aprender, te demandará desde la primera pérdida. Era solo una ganancia, por eso el dicho favorito de mi padre, que Dios tenga misericordia de él, era "trabajar en silencio y golpear fuerte".