Según Foresight News, el 5 de noviembre, un juez ordenó que el tiempo de votación se extendiera dos horas en nueve colegios electorales en el este de Arizona debido a fallas en el equipo y boletas insuficientes. La Nación Navajo presentó previamente una demanda.

Mientras tanto, se recibieron amenazas de bomba en algunos lugares de votación en el condado de Navajo, lo que provocó que algunos cerraran brevemente.