Incidente de comercio vinculado a la criptomoneda #FOCAI en la blockchain de Solana. Los hallazgos revelaron que un grupo de 15 billeteras sospechosas de ser insiders gastó colectivamente 67.16 $SOL (aproximadamente $14.6K en ese momento) para adquirir 605 millones de tokens FOCAI, que representaban el 60.5% del suministro total. Estas transacciones se llevaron a cabo en Raydium, un intercambio descentralizado en la red de Solana. Los insiders luego procedieron a vender todas sus participaciones por un total de 94,175 SOL, que en ese momento equivalían a aproximadamente $20.5 millones. Esto resultó en una ganancia asombrosa de aproximadamente $20.48 millones para el grupo.
La trama se complicó cuando Lookonchain emitió una corrección, revelando que el equipo de desarrollo del proyecto había utilizado billeteras internas adicionales para asegurar el suministro del token. Esto implicó aún más al equipo de FOCAI en la orquestación del comercio. El descubrimiento ha causado revuelo en la comunidad de criptomonedas, con muchos expresando indignación por la magnitud de las ganancias obtenidas a través de lo que se percibe como la explotación de información privilegiada.
#FOCAI , una criptomoneda centrada en IA, tuvo un debut prometedor, aumentando rápidamente su valor poco después de su lanzamiento. En cuestión de minutos, el proyecto alcanzó una capitalización de mercado de $50 millones, con un volumen de comercio alcanzando un pico de $48.2 millones en menos de una hora. Sin embargo, tras la actividad de comercio interno, el valor del token se desplomó, y su capitalización de mercado cayó a $32.7 millones. A medida que el precio disminuyó, muchos analistas comenzaron a expresar preocupaciones sobre la legitimidad del proyecto.
Un prominente analista de criptomonedas, @olegmetaverse, señaló a FOCAI como una posible estafa, citando varias señales de advertencia. Entre los problemas planteados estaban la falta de integridad técnica del proyecto, su fuerte dependencia de palabras de moda como "IA" y "𝐛𝐥𝐨𝐜𝐤𝐜𝐡𝐚𝐢𝐧," y la ausencia de un respaldo técnico sustancial. Un análisis adicional reveló que FOCAI parecía ser una mera copia de una criptomoneda existente, Eliza, con poca innovación. El proyecto también sufría de documentación deficiente, tokenómica poco clara y una base de código débil, sugiriendo que carecía de la transparencia y seguridad esperadas de proyectos de blockchain legítimos.
