Se estima que la liquidez durante el día será más baja que en un fin de semana habitual, y esta situación debería mantenerse hasta el final de esta semana. La próxima semana, la liquidez comenzará a regresar gradualmente. Por lo tanto, en estos días, el precio de BTC podría seguir oscilando en torno a los 95,000 dólares, e incluso no se descarta la posibilidad de que el rango de oscilación se amplíe. Sin embargo, desde el punto de vista de la tendencia, no ha habido cambios.
Ahora, cada vez más analistas mantienen una visión bastante pesimista sobre 2025, principalmente debido a que el suministro de liquidez se ve restringido por la Reserva Federal. El precio del dólar ya está en su punto más alto en 2023 y 2024, y la diferencia con el máximo de 2022 no es grande. Podría ser que, después de la reunión de política monetaria de enero, el índice del dólar llegue a 110.
Así que, mientras la Reserva Federal no cambie de opinión, el principal impulso del mercado de criptomonedas seguirá dependiendo de las emociones, y la mayor fuente de estas emociones es la transición de poder de Trump. Si las elecciones son la primera ola, la transición de poder es la segunda ola, y cumplir las promesas hacia la industria de criptomonedas será la tercera ola. Ahora mismo estamos al final de la primera ola, así que en términos de emociones, mantener la situación es un buen resultado. A menos que surjan nuevas noticias positivas, lo más probable es que la oscilación sea la tendencia predominante.
La próxima semana comenzará a ser dos semanas hasta la transición, así que poco a poco deberíamos comenzar a ver algunas pistas. Por lo tanto, este tiempo de incertidumbre es el más agotador, ya que, en el futuro, nadie puede predecir con certeza. Decir que se pierde sin sufrir tampoco es seguro, así que actualmente estamos en un PVP emocional.