En este mercado, hay algunos grandes jugadores que aman jugar con los contratos, pero parecen no darse cuenta de qué impacto a largo plazo tiene esto. Recientemente, cuando el precio de la moneda oscilaba alrededor de 1.4, muchos inversores se lanzaron a abrir contratos largos, y como resultado, no solo no estabilizaron el precio de la moneda, sino que, por el contrario, provocaron una caída aún más fuerte.

Si no seguimos la agitación de los contratos y nos enfocamos en el mercado al contado, podemos darnos cuenta de que los grandes jugadores realmente tienen otros planes. Cuando el precio de la moneda cae, ellos aprovechan la oportunidad para comprar más, sabiendo muy bien que es un buen momento para reabastecerse. Si esperamos a que el precio de la moneda vuelva a subir para entrar, eso sería como saltar a una trampa, el riesgo sería muy grande.

Debemos ser astutos y no seguir ciegamente a otros abriendo contratos largos, así no solo evitamos causar problemas a los veteranos del mercado al contado, sino que también nos aseguramos de no perder todo. En el mercado al contado, cuando el precio de la moneda cae, esa es una buena oportunidad para aumentar nuestra posición, debemos ser pacientes y avanzar paso a paso. De esta manera, no importa cómo se sacuda el mercado, podremos mantener la calma y esperar a que las ganancias vengan por sí solas.

En otras palabras, la verdadera persona inteligente ve a través de la esencia del mercado y no se deja deslumbrar por esos adornos superficiales. Invertir de manera estable en el mercado al contado es el camino, es la gran avenida hacia nuestra libertad financiera.