Este joven de 20 años llevó a cabo uno de los mayores casos de robo personal en la historia.

Su nombre es Malone Lam.

En agosto de 2024, estafó a una víctima con 4100 bitcoins y utilizó ese dinero para comprar 31 supercoches.

Este es el sencillo método que utilizó: 🧵

El joven de 20 años de Singapur, Malone Lam, y su cómplice, Jandiel Serrano, robaron criptomonedas por valor de 230 millones de dólares a una víctima anónima hace unos meses, y luego ambos fueron arrestados.

¿Cómo sucedió esto?

El estafador primero activó una notificación de "acceso no autorizado a la cuenta de Google" utilizando métodos técnicos, lo que hizo que la víctima sospechara de anormalidades.

Días después, Malone Lam se hizo pasar por un empleado de Google y llamó a la víctima para preguntar sobre los detalles de esos "accesos no autorizados".

Después de múltiples comunicaciones, fue manipulando a la víctima, obteniendo suficiente información para acceder exitosamente al Google Drive de la víctima.

En Google Drive, encontraron la información personal de la víctima, incluyendo los detalles de sus activos de criptomonedas en la plataforma Gemini.

Luego, su cómplice Jandiel se hizo pasar por un empleado de la plataforma Gemini y volvió a contactar a la víctima.

Jandiel logró convencer a la víctima de que descargara un software que supuestamente podría "proteger los activos criptográficos".

El estafador utilizó este software para robar la clave privada de la víctima y sustraer hasta 4100 bitcoins.

En ese momento, el valor total de esos bitcoins era de hasta 230 millones de dólares.

Los dos luego blanquearon el dinero robado a través de varios intercambios de criptomonedas y servicios de mezcla.

¿Cómo fueron atrapados?

Malone Lam comenzó a derrochar locamente con su parte del dinero robado.

Gastó sin control en las calles de Los Ángeles, ¡gastando 569,000 dólares en una sola noche en un club nocturno!

Incluso regaló cinco bolsos Birkin de Hermès a varias damas en el club nocturno.

Los documentos judiciales muestran que compró 31 supercoches, un reloj valorado en 2 millones de dólares y alquiló múltiples apartamentos de lujo en Los Ángeles y Miami.

Finalmente, fue arrestado mientras volaba en un avión privado de Los Ángeles a Miami.