Cuando me enviaste este regalo, lo dejé en mi escritorio.

Luego tomé esta foto para ver qué tan bien se veía...

Si un día te rindes, mira esto, date cuenta de ti, date cuenta de tu valor, eres la chica más fuerte que he visto en esta vida, eres un genio.

Estos te representan y los niños que críes te representarán.

Fue una de las mejores frases que me llegaron después de una larga depresión.

Nunca olvido el dicho nunca te rindas...

No sé por qué desapareciste sin decir nada, pero te extraño mucho.

Desde que te fuiste, me he sentido como una pieza de un juego arrojada a un universo en el que querías que no encontrara mi camino. No sé dónde estás, qué estás haciendo, pero si apareces un día te romperé la cabeza, para que lo sepas 😥