Según un informe de Decrypt, el 15 de diciembre, Rusia está probando un nuevo sistema llamado TSPU, que utiliza herramientas de gestión de tráfico desarrolladas internamente y es creado, distribuido y controlado por el regulador nacional de telecomunicaciones Roskomnadzor, capaz de cortar el acceso a Internet global. Los resultados de las pruebas preliminares indican que incluso utilizando una red privada virtual (VPN) no se pueden eludir estas restricciones.

El Ministerio de Desarrollo Digital de Rusia planea invertir aproximadamente 60 mil millones de rublos (6.6 mil millones de dólares) en los próximos cinco años para mejorar su sistema de censura de tráfico en línea. Según un estudio del proyecto de seguimiento de censura en línea Censored Planet, el sistema TSPU permite a las autoridades rusas monitorear y filtrar el tráfico de Internet, pudiendo restringir el acceso a ciertos sitios y servicios mientras asegura que los recursos aprobados en el país permanezcan accesibles. La creación de este nuevo sistema marca un paso importante para Rusia en la construcción de un 'Internet soberano'.