Los bancos centrales europeos han comenzado a repensar sus políticas a medida que Donald Trump se prepara para asumir el control de la Casa Blanca por segunda vez. Con la próxima administración Trump, existe un miedo a guerras comerciales, monedas volátiles y otros cambios económicos. Los responsables de políticas europeas ahora están tomando la iniciativa para proteger sus economías recortando las tasas de interés mientras insinúan recortes futuros.
El Banco Nacional Suizo (SNB) lideró la iniciativa, sorprendiendo a todo el mercado con un recorte de tasas de medio punto, llevando su tasa a 0.5%. Esta es la primera vez desde 2022 que Suiza ha experimentado tasas negativas durante aproximadamente ocho años. Mientras tanto, el Banco Central Europeo (BCE) también afectó su punto de tasa cuartil, bajándolo a una tasa que no se veía desde hace más de un año. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, discutió el plan de acción. Los recortes continuarán el próximo año, con fuentes con conocimiento señalando que podría llegar a marzo.
Las políticas de Donald Trump obligan a los bancos centrales a buscar refugio
El SNB está en pánico, ya que el franco suizo, un refugio seguro en crisis global, le está causando ansiedad. El vicepresidente del SNB, Antoine Martin, ha destacado los efectos del riesgo externo en la economía del país. El SNB hará todo lo posible para estabilizar la moneda, incluidos la sanción de más recortes de tasas o la recuperación de recortes negativos. Mientras tanto, el presidente del SNB, Martin Schlegel, ha advertido a los comerciantes sobre poner a prueba la determinación del banco central.
El BCE, por su parte, está observando una economía débil y una inflación lenta. Sin embargo, el problema más grande sigue siendo las políticas comerciales de Trump. El banco ya recortó sus tasas de depósito en un 25%, llevando los puntos a menos del 3%. El recorte de puntos señala el tercero consecutivo, totalizando 100 desde junio. Lagarde también dijo que el banco está alejándose de las políticas monetarias restrictivas, con su última proyección pintando un panorama sombrío. Se proyecta que el crecimiento de la zona euro será del 1%, una caída respecto al 1.3% proyectado anteriormente.
Las economías globales quieren redes de seguridad
Europa no es el único lugar donde hay pánico por hacer la economía más fuerte contra las políticas de Donald Trump. El banco central canadiense recortó sus tasas en 50 puntos básicos, citando temores de aranceles más altos de los Estados Unidos. Por su parte, Brasil tomó la decisión de aumentar su punto base en 100 puntos, una decisión que tomó para estabilizar su moneda. La decisión se tomó después de que Trump prometiera un arancel del 100% a los miembros de la alianza BRICS si intentan alejarse de depender del dólar.
Sin embargo, el BCE tiene problemas que necesita resolver. Por ejemplo, el crecimiento de la zona euro aumentó en el tercer trimestre, con grietas visibles apareciendo en varios sectores. Su sector manufacturero ha sido débil durante meses y su sector de servicios sigue el mismo camino. Fabio Panetta de Italia y François Villeroy de Galhau de Francia han hablado sobre el uso de recortes de tasas para impulsar el crecimiento, mientras que Joachim Nagel de Alemania ha advertido sobre exagerar.
Los inversores y responsables de políticas estarán en alerta anticipando el 20 de enero y las sorpresas que traerá la administración Trump. Mientras tanto, la Reserva Federal ha decidido recortar tasas tras la llegada de datos de inflación. Los bancos centrales globales pueden seguir el ejemplo, debido a las políticas de Trump.
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca provoca que los bancos centrales europeos suavicen sus políticas, apareció primero en Coinfea.