Los accionistas de Microsoft han rechazado una propuesta que dirigiría a la compañía a invertir en Bitcoin.
El improbable empuje para que Microsoft, una de las compañías más valiosas del mundo, comprara Bitcoin provino del Centro Nacional para la Investigación de Políticas Públicas, un grupo de reflexión conservador.
La organización ha presentado más de 60 propuestas en empresas de Fortune 500 instándolas a considerar una variedad de propuestas, desde revisar los supuestos riesgos de las iniciativas de diversidad hasta invertir en Bitcoin como cobertura contra la inflación.
A pesar del empuje y el año destacado de Bitcoin —ha subido más del 118% desde el 1 de enero— pocas empresas no cripto han copiado el manual establecido por MicroStrategy, la firma tecnológica que ha obtenido grandes ganancias al invertir miles de millones en Bitcoin.
Microsoft pidió a sus accionistas que votaran en contra de la propuesta, citando la volatilidad de las criptomonedas y la necesidad de la compañía de tener "inversiones estables y predecibles para asegurar la liquidez y el financiamiento operativo."
Los resultados detallados de la votación se publicarán en el sitio web de Microsoft en los próximos días, dijo el abogado general adjunto Keith Dolliver durante la reunión anual de accionistas de la compañía.
Fue una de seis propuestas de accionistas consideradas el martes, todas las cuales fracasaron, según un conteo preliminar.
Los defensores de Bitcoin han argumentado durante mucho tiempo que la criptomoneda original, con su suministro finito, demostraría ser un valioso refugio contra la inflación.
A instancias de ellos, el presidente electo de EE.UU., Donald Trump, se comprometió a convertir el Bitcoin incautado por las fuerzas del orden en un "depósito estratégico nacional de Bitcoin" que podría usarse para reducir la deuda del país. Propuestas similares se han presentado en al menos dos estados de EE.UU.
Pero la idea ha sido criticada por economistas inclinados a la conservaduría, quienes argumentan que la principal consecuencia sería un aumento en los precios de Bitcoin a expensas de los contribuyentes estadounidenses, que quedarían con el peso si el activo notoriamente volátil se desplomara posteriormente.
Durante una breve sesión de preguntas y respuestas al final de la reunión, la directora financiera de Microsoft, Amy Hood, dijo que la compañía ha estado mirando hacia el futuro en lo que respecta a las criptomonedas, señalando que ha aceptado algunas criptomonedas como pago desde 2014.
Pero era "importante recordar nuestros criterios y nuestros objetivos de nuestro balance", continuó, citando "preservar capital, permitir mucha liquidez, [y] poder financiar nuestras operaciones, asociaciones e inversiones."
No obstante, la apuesta que los accionistas de Microsoft rechazaron ha dado sus frutos para MicroStrategy.
La firma ha agregado criptomonedas por valor de 37 mil millones de dólares a su balance a lo largo de los años, y solo este año las acciones han aumentado más del 450%.
En contraste, las acciones de Microsoft han aumentado un 26% en lo que va del año.
En un video de tres minutos dirigido a los accionistas de Microsoft, Saylor dijo que las corporaciones globales como Microsoft podrían preservar billones en valor si estacionaran su efectivo en Bitcoin.
"Microsoft tiene una elección que hacer: aferrarse al pasado o abrazar el futuro," dijo.
Aleks Gilbert es un corresponsal de DeFi con sede en Nueva York. ¿Tienes un consejo? Contáctalo en aleks@dlnews.com.