El auge de las altcoins en 2021 fue impulsado por el FOMO, coincidiendo con la pandemia de COVID, cuando la mayoría de las personas se quedaron en casa. Esto resultó en un aumento generalizado en los precios de las altcoins.
Este año, sin embargo, las instituciones son los principales actores, con un capital mucho mayor en comparación con los inversores minoristas. Como resultado, solo algunas altcoins seleccionadas probablemente experimentarán un crecimiento significativo.
Mi opinión: Este cambio marca un mercado de criptomonedas en maduración. Las instituciones se enfocan en la utilidad, los fundamentos y el valor a largo plazo, no en la exageración. Los inversores minoristas necesitan adaptarse identificando proyectos con un sólido respaldo institucional o casos de uso claros en el mundo real. La era de los aumentos especulativos en cada altcoin parece estar desvaneciéndose, haciendo que el análisis estratégico sea más crítico que nunca..