Los proyectos comunitarios no se refieren a proyectos sin equipo, sino a aquellos en los que la comunidad puede participar activamente en el proceso de creación y descubrimiento de valor.
Su núcleo radica en que los miembros de la comunidad puedan obtener una sensación de participación, pertenencia y efecto de riqueza.
Cuando los miembros pueden desempeñar un papel en el proyecto, experimentando su propia contribución y valor, se genera una fuerte lealtad.
Este punto es crucial, y también es la mayor diferencia entre los proyectos comunitarios en la cadena y los proyectos de intercambio.
Los proyectos comunitarios en la cadena dependen más de la participación conjunta de la comunidad y del consenso, mientras que los proyectos de intercambio generalmente se centran más en el lado del proyecto y en la operación del mercado.